Decidan ustedes:
Crítica negativa:
Come, reza, ama es el último título protagonizado por Julia Roberts, que ahora llega a España tras una tibia acogida comercial en Estados Unidos. La película, que cuenta entre sus productores con Brad Pitt, se basa en la novela autobiográfica homónima escrita por Elizabeth Gilbert, y cuenta las peripecias de una mujer que, tras divorciarse de su marido, se toma un año sabático y emprende un viaje alrededor del mundo en busca de sí misma, de la paz espiritual, y por último (aunque no menos importante, claro), de la felicidad y el amor. Quien pudiera, oyes …
Julia Roberts, a sus cuarenta y pico años, sigue empeñada en seguir siendo ‘la novia de América’, y para ello se ha dado todo homenaje a sí misma en forma de comedia emotiva épica. No, no has leído mal, querido lector. Come, reza, ama representa la entrada de la épica en el subgénero ‘Julia Roberts’. Y esto es así tanto por la duración de la cinta, como por el hecho de que la actriz ande paseando su habitual colección de caprichosas dudas existenciales, pucheros y ojitos tristes a lo largo de medio mundo. Para más inri, la película se aprovecha de todos los tópicos y clichés imaginables de las localizaciones que tienen la suerte (o no) de contar con su presencia: Italia, India y Bali.
‘Mammoni’ babosos, matrimonios hindúes concertados, gurús con más cara que espalda, chamanes cachondos, forretis ociosos de turismo en extremo oriente … todos ellos ‘aportarán’ a la protagonista distintas maneras de encarar y llenar de nuevo su vacío existencial. Para acompañarla en ese viaje de ‘transformación’, en torno a la Roberts se ha reunido un abanico de actores interesantes, cuyos personajes inevitablemente bailarán al son de los caprichitos de la protagonista. James Franco, Richard Jenkins, Javier Bardem y Billy Cudrup interpretan a los pobres infelices encargados de dar consuelo al ‘sufrimiento’ de Lizzy Gilbert. De ellos, quizá sea el personaje de Richard Jenkins el único que proporciona un momento verdaderamente emotivo y creíble.
Crítica positiva:
Yo también veo lo malo de la película y la crítica anterior me parece razo0nable y justa. Pero a favor de la película hay que decir que al menos entretiene, al menos está bien estructurada en tres partes: En Italia la protagonista disfruta del placer del ahora, la comida, las personas. En la India se descubre así misma a través de gurús y curanderos y en la tercera, equilibrada, se enfrenta de nuevo al amor verdadero. Es un final feliz facilón, pero no sienta mal en estos tiempos donde la crisis nos hace endurecer el ánimo y pone a prueba nuestra calma.